¡Buenos días!
Hacía mucho que no publicaba una receta pero es que con esta no me he podido resistir!
Últimamente, entre las fiestas, acontecimientos y demás, hemos hecho muchas comidas y cenas en casa y claro, ¿Cómo no voy a preparar el postre?
Y siempre digo lo mismo: "nada, compramos cualquier cosa ligera porque luego es mucha comida". Pero al final siempre acabo cayendo, nada de comprar y mucho menos de ligero. Es que en el fondo me encanta liarme a hacer mil cosas...
Uno de esos postres, es este, riquísimo, facilísimo y además os ahorráis encender el horno porque no necesita.. Os animo a hacerlo cuando podáis y ya veréis que bien vais a quedar.
¡Espero que os guste!
¡Besos!
Tarta de Chocolate Blanco y Galletas
Ingredientes
500 ml de nata (33% de materia grasa)
150 grs de chocolate blanco
3 cucharadas de leche condensada
400 ml de leche
2 sobres de cuajada
Para la base de galletas:
50 grs de mantequilla derretida
Galletas Digestive
Preparación
Lo primero que vamos a hacer es preparar la base de galletas. Para ello, vamos a triturar las galletas en un procesador (y si no tenéis, se pueden rallar a mano). Mezclamos las galletas trituradas con la mantequilla derretida y lo echamos sobre un molde (presionando bien para que se prense la base).
Mejor que sea desmoldable para luego poder desmoldar la tarta, y sino, en moldes individuales como he hecho yo. Lo metemos en la nevera hasta que tengamos lista la crema de arriba.
En un bol preparamos los dos sobres de cuajada con la leche (aconsejo ir echándola poco a poco para que no se hagan muchos grumos). Reservamos.
Poner la nata a calentar y cuando hierva, echamos el chocolate blanco en trozos. Removemos con unas varillas hasta que el chocolate este disuelto y después echamos las 3 cucharadas de leche condensada.
El siguiente paso es echar la leche con la cuajada que tenías de antes, sobre la preparación de la nata y chocolate. Mezclamos todo con las varillas y llevamos otra vez al fuego, SIN DEJAR DE REMOVER, hasta que vuelva a hervir.
Retiramos del fuego y ya podemos vertirlo sobre la base de galletas, hacerlo de forma cirular y no con mucha fuerza, para no levantar la galleta y que se vea trocitos.
Volvemos a meter en la nevera para que se cuaje bien, mínimo 4 horas, podéis dejarlo toda la noche. Cuando este cuajado, con un cuchillo caliente (metido en agua caliente y lo seco), lo pasáis por el borde para desmoldar.
¡Y a disfrutar!
pd: las tacitas pintadas son de
AQUÍ, un nuevo proyecto en el que colaboro ^^
